Una nueva salida con todo el frío del invierno, pero esperada con mucha ilusión, ya que nos vamos a esquiar a Formigal las niñas y yo, María José en esta ocasión pasa, no le gusta nada esquiar y el frío y la nieve tampoco le apasionan, así que nos vamos los tres solos. Coincide justamente el periodo entre Nochebuena y Nochevieja de lunes a viernes, así que reservamos 3 horas diarias de clase al día para esos 5 días. Estamos los tres como locos por empezar la experiencia.
Hemos venido con la autocaravana a Calera y Chozas donde hemos pasado Nochebuena y Navidad con mis hermanos, así que el día 26, madrugamos y ponemos rumbo a Formigal, son 100 km más que si saliésemos desde Madrid, pero nos da igual, vamos con todas las ganas del mundo. El camino se me hace largo y tengo los nervios a flor de piel, es la primera salida larga a la nieve, además de con curso de esquí y sin la compañía de María José. Las condiciones climatológicas son perfectas, lleva nevando varios días, y hace un par de ellos, ha caído un paquetón de más de 1 metro, así que están abiertas todas las pistas, pero la previsión para esta semana es de sol y frío, lo ideal para la nieve.
Hacemos una parada para comer a la altura de Huesca, ya nos queda poco y estoy loco por llegar, además por mi desconocimiento, prefiero llegar con luz del día, así que no nos entretenemos mucho. Al poco del salir de la parada iniciamos la subida al Monrepós, que hacemos sin problema, la nieva hasta estos momentos brilla por su ausencia, una vez salimos del túnel, aparece ante nuestros ojos una vista impresionante, los Pirineos en su máximo esplendor, todo cubierto de nieve, la luz del sol de media tarde iluminando su blancura, y un escalofrío recorre mi columna, ¡donde me estoy metiendo!. Según nos vamos acercando, me voy tranquilizando, la carretera está en perfecto estado y el cielo está claro y soleado, así que no hay porqué preocuparse. Finalmente llegamos a la estación, que está bastante despejada de coches, así que bajamos hasta la misma puerta y nos vamos a por el alquiler de material, una vez con todo el equipo, el siguiente paso es recoger los tickets de las clases de esquí, que hacemos en en la escuela española de esquí. Ya tenemos todo preparado, así que nos volvemos la autocaravana, para buscar nuestro lugar de pernocta, que encontramos en la zona alta del parking, alejados de las oficinas y junto a otras tantas autocaravanas. Un poco de juego con la nieve, cena y a la cama, mañana se prevé un gran día.
Noche muy tranquila, la temperatura es buena y con la calefacción se aguanta perfectamente. Nos cuesta levantarnos, y algo también ponernos en marcha, así que hasta las 10:00 no salimos de la autocaravana dirección a nuestras clases. Cuando llegamos a las pistas, ya se tienen los grupos organizados, por lo que nos tenemos que poner al día rápidamente de donde vamos. A Arancha y Laura las dejo con el grupo Iniciación de pequeños, y yo me voy a la búsqueda del grupo de nivel 1, ya que yo ya he esquiado en un par de ocasiones y lo básico creo que ya lo tengo más o menos dominado. Una vez todos acoplados iniciamos nuestras clases.
Durante los siguientes 4 días nuestra rutina es muy similar, levantarnos a las 08:00, desayunar tranquilamente, aseo y puesta del equipo de esquí, para sobre las 09:30-09:45, salir de la autocaravana para encontrarnos con nuestro curso, que inicia a las 10:00 y dura hasta las 13:00. Cada uno lleva en sus bolsillos un buen aperitivo de chocolate para media mañana: huesitos, kit-kat ó similar. A las 13:00 nos reunimos nuevamente los tres y nos vamos a la autocaravana, donde nos quitamos los trajes y nos ponemos cómodos para una tranquila comida caliente y tras un pequeño descanso, sobre las 15:00 volvemos a las pistas dos horas más (hasta su cierre), y aprovechamos para que cada uno cuente al resto lo que más le ha gustado de la mañana, y practicamos todos juntos las bajadas que hemos realizado por la mañana.Una vez cerradas las pistas, merendamos algo y descansamos después de un largo día de esquí, jugamos a alguna cosa en el calor de la autocaravana ó incluso salimos a dar una vuelta por la estación y la zona de apre-esquí. El miércoles, salimos a celebrar un buen día de esquí, con una cena en el restaurante de la gasolinera que hay junto a la estación, donde nos decantamos por unas exquisitas alitas (Arancha), una hamburguesa (Laura) y una pizza (yo).
Y llega el viernes 31 diciembre, nuestro último día de estancia, la rutina es idéntica a los anteriores, salvo que tras las clases de esquí, a las 13:00, nos vamos a devolver el equipo, y antes de que la gente empiece a salir disparada de la estación en dirección a su lugar de celebración de la Nochevieja, nosotros ya estamos de camino de vuelta a Madrid. Un par de horas más tarde, habiendo salido ya de los Pirineos, hacemos una rápida parada para comer algo y seguimos camino rápidamente.
Llegamos a Madrid poco antes de las 21:00 para encontrarnos todo preparado para una Nochevieja en familia, con una mesa toda engalanada y unos mangares que nos están esperando para ser devorados, ¡¡nada mejor para finalizar un año lleno de aventuras !!!
Resumen:
Fechas: del dom. 26/12/2010 al vie. 31/12/2010
Zonas visitadas: Estación Esquí Formigal
Noches: 5
Pernoctas: Parking Sextas (zona baja) - Formigal x 5
Km(ida y vuelta): 1070 km