Oliva 2012 - Regreso al paraíso con escala

Un año más preparamos nuestra escapada veraniega de relax y windsurf en Oliva, en esta ocasión con dos novedades fundamentales: por una parte no salimos directamente de Madrid a Oliva, si no que pasamos primero por Alicante, y segundo, este año el congelador lo llevamos cargadito, paso a relatar.



Todos los años, en nuestra salida a Oliva, el mismo día de la salida hemos llenado la nevera y congelador de todo lo necesario para la primera semana, pero siempre me ha dado la sensación de que hemos desperdiciado gran parte del congelador, así que este año, un mes antes de salir me bajé a la AC y medí las dimensiones del congelador, aprox: 40 cm ancho, 20 cm fondo y 16 cm de alto, así que me busqué un par de tuppers de 10x10 y cada 2 ó 3 días bajaba a la compra y ponía a congelar en dichos tupper (con plásticos) pechugas de pollo y filetes de ternera, al final, el día de partir tenía tenía cerca de 16 dados de carne, ordenados y listos para ser consumidos previa descongelación, ha sido todo un éxito.

Una vez repasada la lista de todo lo necesario para el camping, lo tenemos que dejar todo más o menos recogido dentro de la AC sin que estorbe en exceso durante todo un fin de semana, dado que no vamos directamente al camping si no que tenemos que salir dirección a Alicante, donde pasaremos el fin de semana, para recoger del aeropuerto a Laura que viene de Irlanda y llevar a MJ posteriormente a la estación de autobuses para que se vuelva a Madrid.

Salimos el viernes lo antes que puedo, y tras subir los últimos trastos (equipo de windsurf,  congelador y electrónicos) ponemos rumbo a Alicante por la AP36 para evitar en lo posible el tráfico. El viaje se nos da muy bien, con poco coche y nada de retenciones y cuando nos queremos dar cuenta ya estamos en Arenales del Sol, población veraniega próxima a Alicante en donde gracias a Google View había localizado un precioso enclave frente a la playa en la avenida de San Bartolome, pero el vídeo mejora sustancialmente a la realidad, y nos encontramos con un enclave abarrotado de veraneantes, coches y ruido, finalmente al final de dicha avenida encontramos alguna zona más tranquila donde decidimos parar para pernoctar. Tras la cena y una vuelta para estirar las piernas (y tomar un helado) en compañía de los padres de la compañera de Laura que está con ella en Irlanda, y que casualmente tienen en dicha población un chalet, nos retiramos a dormir.

La noche es algo asfixiante y solamente tenemos abierta la claraboya superior, a las 06:30 de la mañana ya nos está dando el sol en plena Autocaravana, y es que estamos en primera línea de playa, y a las 09:00 ya no hay quien soporte estar dentro, así que nos vamos a pasar la mañana a la playa. Al poco tiempo  llegan los padres de la compañera de Laura con los que pasamos la mañana y amablemente nos invitan a una  barbacoa en su casa, menos mal, pues no creo que pudiésemos entrar en la AC a comer en esas condiciones. Así que pasamos la tarde con ellos y a media tarde MJ y los padres se van a un mercadillo, mientras Arancha y yo regresamos a la AC a merendar y prepararnos para ir a buscar a Laura al aeropuerto. Poco antes de la hora de salir MJ me llama que está atascada en el medio de Alicante en la concentración de Orgullo o algo así y que no sabe si le dará tiempo a ir a buscarnos, así que me vaya yo solo con Arancha, y dicho y hecho, salimos pitando los dos para el aeropuerto, con más miedo que vergüenza a ver donde aparcar la AC en el aeropuerto, aunque ya había visto que el P3 es un parking de alto gálibo y finalmente no encuentro excesivos problemas para aparcarla.

Llega Laura tras una hora haciéndose esperar, muchos abrazos y lágrimas tras una separación tan larga y llega el momento de decidir a donde vamos a ir a pernoctar, parece que volver a la playa no es una opción, por el calor sofocante que habíamos pasado, así que aceptamos la propuesta de los amigos de ir a su urbanización y aparcamos en un callejón paralelo a la avenida de Polonia (una urbanización en la montaña próxima a Arenales del Sol), donde pegados contra una tapia, nos sentimos seguros de dejar algunas ventanas abiertas para que corra el fresco y donde por la mañana los chalets nos resguardan de los primeros rayos de sol.

La noche es tranquila y mucho más acogedora, sin llegar a tener fresco, tampoco pasamos calor. Desayunamos y pasamos la mañana en la piscina de la urbanización, parece que nadie ha puesto pega por nuestra presencia, un tanto intrusiva. Tras la comida es hora de partir, así que nos despedimos de nuestros anfitriones agradeciendo su hospitalidad y ponemos rumbo a la estación de autobuses, donde MJ se despide de nosotros y marcha de regreso a Madrid, mientras que nosotros ponemos rumbo a Oliva donde ya sin ningún movimiento (salvo los de entrada y salida de visitantes) pasaremos las próximas 27 noches.


Resumen:
Fechas: del vie. 20.Julio al sab. 18.Ago 2012
Zonas visitadas: Arenales del Sol y Oliva
Noches: 29
Pernoctas: calle San Bartolome de Tirajana, avenida de Polonia y camping Azul (Oliva)x27
Km(ida y vuelta): 1000 km