Ultima semana de vacaciones, destino: Gijon. Objetivo: hacer un curso de vela ligera toda la familia junta.
Salimos el sábado 1 a media mañana, aunque nuestro destino es Gijon, no tenemos prisa por llegar, hasta el domingo por la noche no tenemos que estar allí, así que en el trayecto, con el iPad, vamos buscando que hacer el sábado y donde pasar la noche, miramos la zona de las Medulas, pero aunque parece muy interesante, nos desviamos un poco de mas. Finalmente vemos que pasamos por León, así que por unanimidad decidimos que es un buen destino, ademas en nuestra parada para comer en un área de descanso, verificamos que hay parking para autocaravanas muy próximo al centro, así que decidido, ponemos rumbo a Leon. Llegamos pronto a Leon, y las niñas y yo cruzamos el puente junto al área en busca de un parque con una pirámide de cuerdas que hemos visto al pasar, mientras que MJ se queda dando un rápido repaso a sus apuntes para su proximo examen de auxiliar. Tras 3 o 4 subidas y bajadas de la pirámide vemos que el parque se nos queda pequeño, así que decidimos regresar a la AC y junto con MJ irnos a visitar la ciudad monumental. Llegando al centro, vemos que hay un pequeño tren turístico y dado que vamos con tiempo y que realmente no hemos mirado nada acerca de Leon, parece una buena opción para que nos den una rápida visita por toda la ciudad monumental y nos cuenten las principales curiosidades de la misma. La verdad es que el paseo aunque agradable, se hace un poco escaso, ya que no vemos que la ciudad tenga muchas cosas, mas bien 2 o 3 cosas, pero muy importantes, como son: la Catedral, con su principal atractivo en las vidrieras (1.800 m2), la casa de Botines (de Gaudí), el Hostal de San Marcos (parador de Turismo de 5* Gran Lujo) y la iglesia de San Isidoro. Tras la vuelta con el tren, nos adentramos a pie por las mismas calles, para seguir disfrutando de su belleza. Finalmente, tras la adquisición de unas cajas de productos típicos (hojaldres), nos adentramos en el bario húmedo, zona de tapeo por excelencia de Leon, otro de los grandes atractivos de la ciudad. Cuando regresamos a la AC, tras 2 o 3 rondas, ya ninguno tenemos hambre para cenar, así que nos vamos todos a la cama, al día siguiente nos queda volver a recorrer la ciudad a poena luz del día.
La noche es tranquila y acogedora, pero se nota que estamos mas al norte, ya que la temperatura ha bajado considerablemente, aunque de eso ya nos dimos cuenta la tarde anterior, donde a ultima hora los que nos habíamos ido de pleno verano, nos quedamos pasmados de frío. Tras el desayuno volvemos a la parte histórica, recorriendo callejuelas y admirando la belleza y tranquilidad de esta ciudad, y como no, antes de regresar a comer a la AC, hacemos una nueva visita al barrio húmedo. Tras la comida y un visita de las niñas al parque infantil de detrás de la cafetería, con una magnifica tirolina, ponemos rumbo a Gijon,
Nuestra primera intención es pernoctar en el Parking de Poniente, pero cuando llegamos, vemos que aunque hay varias autocaravanas, el parking es largo y estrecho con solo sitio a un lado y otro, y ninguno de los dos unicos huecos que hay libres es suficientemente ancho como para encajar razonablemente nuestra AC, así que nos dirigimos al otro parking existente también muy próximo: el de la avenida de Portugal. Nuestra intención es dar una vuelta por el puerto deportivo y controlar tiempos para el lunes no llegar tarde a nuestra primera clase de vela en un flamante 595. Controlamos que tardamos en llegar unos 20-25 min, siempre y cuando no nos perdamos, y encontramos sin problema el club de vela bahía de Gijon, donde tenemos hecha la reserva. También pasamos por el área de información donde nos comentan que precisamente el sábado anterior han abierto un área (con sus tomas de agua y vaciado) en la playa mas occidental de Gijon, así que quedamos con los chicos de la oficina que iremos allí a realizar el vaciado y demás, y luego les contaríamos que tal nos había parecido. Pasamos también a ver el centro de Talasoterapia que hay en la misma playa, y ya se nos hace la hora de regresar a nuestro hogar.
La noche en la avenida de Portugal es tranquila, aunque no exenta de ruidos, ya que el parking se encuentra encajada entre la propia avenida, de bastante trafico, las vías del tren y la A8. En 1 hora estamos ya todos desayunados y con nuestras mochilas listas para la aventura: unos escarpines, pantalones cortos/bañador, crema solar, una sudadera y un chubasquero (por si las moscas). Bastante antes de lo previsto estamos en el club, donde tras esperar unos 30 minutos, conocemos a nuestro monitor: Sergio, que nos da una lección magistral de 2 horas donde aprendemos: partes del barco, verbos marineros, rumbos y nudos. Las dos ultimas horas las pasamos en altamar, tomando nuestro primer contacto con el mundo de la vela ligera. Tras el curso, volvemos a la AC y tras la comida llamamos a nuestros amigos asturianos del camping Azul, Mara y Marcos y su padre Jose y quedamos com ellos, paseamos por Cimadevilla y acabamos cenando en el puerto unas exquisitas pizzas en el Vesuvio.
El martes, tras una noche tranquila volvemos a salir a navegar, esta vez con menos viento y nos pasamos flotando la mitad de la mañana, al final Arqncha acaba arrojando por la borda, y nosotros con unos 4-5 nudos conseguimos hcernos con el barco. Por la tarde tras la comida nos vamos a visitar el recién inaugurado área de Gijon, con estupenda ubicacion frente a la playa del Arbeyal, con gran capacidad, y solamente con la pega de que solamente hayan puesto un grifo el cual tiene muy poca potencia. Coincidimos con la gente de la Paca y la Capa que han quedado con la TPA para realizar un reportaje sobre la inagiracion del area, pero nosotros que somos muy timidos, preferimos par inadvertidos. En el área enchufamos el boiler con el objetivo de pegarnos unas buenas duchas de agua calentita, pero lamentablemente el agua no conseguimos que salga nada mas que templada, y así se duchan Maria Jose y Laura, pero a mi entender eso no es agua templada, si no fría, así que reviso el interrtor y veo que hay una señal de "alerta" encendida, eso quiere decir que algo no ha funcionado bien, así que siguiendo instrucciones, apago el boiles y enciendo 5 minutos después y listos, Arancha y yo nos duchamos con agua bien calentita. Una vez duchados y cambiadas aguas, regresamos a pernoctar al centro, pero en vez de ir al parking de Portugal nos vamos al parking de Poniente, mucho mas tranqilo y mas próximo al puerto deportivo.
El miércoles sale algo nublado y volvemos al curso, MJ y Arancha abandonan el barco sobre las 12:00 y nos quedamos Laur y yo solas con Miguel (sustituto de Sergio por un día). Laura casi me tira al realizar una virada sin esperar a que yo estuviese preparado, y Laura se empapa toda la. Cabeza haciendo banda mientras le pasa una ola por encima. Por la noche nos vamos a cenar a Cimadevilla, al Lavaderu, donde nos clavan bien clavados, 110 €, gracias a un exquisito tiñoso con patatas, unas croquetas y una docena de zamburiñas a la plancha. Por la tarde nos vamos a ver el museo de la minería, donde bajamos a una mina y nos cuentas las intimidades y complicaciones del lugar. Volvemos a dormir a la avenida de Portugal, ya que al sector femenino parece que les ha gustado mas.
El jueves volvemos al curso con Sergio que nos pone a todos los pelos de punta con unas buenas bandas, la mochila se queda colgada de la vela mayr y nos cargamos la polea de la driza. MJ acaba compeltamente empapada y sin ganas de volver al dia siguiene. Comemos de camino a la AC un menú para 3, en el que podían haber comido media docena. Por la tarde volvemos a quedar con Jose, Marcos y Mara, y esta vez hacen de auténticos anfitriones y nos llevan de ruta por Gijon, por sus zonas comerciales, sus plazas y como no, acabamos en una sidrería,el Llagar de Begoña, donde nos deleitamos por primera vez desde que estamos en Asturias con 2 exquisitas botellas de sidra, como dicen por allí: un par de culines. Volvemos pronto a la AC ya que al día siguiente es el ultimo día de curso y hay que madrugar.
El viernes es el cumpleaños de MJ, así que "despertá" con el cumpleaños feliz y entrega de regalos, y como celebracion de su honomastica, la cumpleañera decide no acudir al curso, ya habia pasado sufienciente miedo el dia anterior. Así que las niñas y yo nos enfrentamos en solitario a nuestra ultima sesión, y nunca mejor dicho ya que Sergio se va con Miguel en una lancha una vez nos han sacado del puerto y nos dejan toda la mañana en solitario, y la verdad es que es una pasada manejar nosotros solos un barco de 6 metros: Laura al timón, Arancha a la mayor y yo en el foque, un equipo perfecto. La verdad es que el tiempo acompaño, ya que no hacia excesivo viento pero si el suficiente como para practicar y disfrutar en solitario de la navegación. Cuando entro Sergio nuevamente al barco, el viento empezó a caer por momentos y Arancha se empezó a marear nuevamente y al final acabo arrojando otra ve por sotavento, así que un poco antes de tiempo decidimos volver a tierra, y como el barco lo iban a utilizar por la tarde nos sobraba mucho tiempo que aprovechamos en ir a dar un paseo con la motora, a toda pastilla, ¡¡¡eso si que lo disfrutamos los tres a tope!!!. Tras el curso nos fuimos a comer al área y así mientras yo recogía, las niñas aprovecharon para ir a darse un baño y MJ a echarse una siesta. Tras una tarde playera total, una nueva ducha, relleno y vaciado de depósitos y ponemos rumbo al próximo destino: Arriondas, donde temos reservadas unas canoas para realizar el descenso del Sella al día siguiente. Llegamos a Arriondas a final de la tarde y encontramos un buen sitio para aparcar al final de la calle de Inocencio del Valle, nos damos una vuelta por el pueblo, vemos el río y junto a el, un restaurante con terraza espectacular al mismo rio y un menú a un módico precio, así que decidimos dejar las salchichas para otro día y nos metemos a celebrar el cumpleaños de MJ como Dios manda.
Ya es sabado, y la noche en el parking ha sido tranquila, nos levantamos temprano ya que hemos quedado con Jose y sus hijos en Ranasella a eso de las 10:30. Estamos todos muy emocionados y no es para menos. El ambiente festivo que se respira es espectacular, ademas del buen tiempo y ser sábado, coincide que es el día de Asturias, con lo que la afluencia al Sella es espectacular. Cogemos 3 canoas, 2 para nosotros y otra para Jose, iniciamos el descenso a las 11:15 y lo finalizamos a las 17:30 en Ribadesella, tras 16km remados, mucho cambio para adaptar los tripulantes en las canoas, mucha tensión en algunos momentos por conflictos entre los tripulantes, pero sobre todo mucho disfrute del paisaje, las paradas para darnos un chapuzón y tomar un piscolabis, la temperatura y el ambiente festivo. Al final los equipos que mejor resultaron fueron: Laura y Marcos, Jose y Mara y Arancha, MJ y yo, que fueron la composición que conseguimos terminar los últimos 6 o 7 km. Tras el descenso, un autobús nos subió nuevamente a Arriondas, donde nos dimos una espectacular ducha en los vestuarios de Ranasella, nos despedimos de nuestros amigos asturianos hasta la próxima y pusimos rumbo a casa. Nuestra intención era llegar hasta Olmedo el mismo sábado noche, no obstante la hora que habíamos acabado y el alto nivel de cansancio que llevábamos acumulado lo hacia inviable, así que decidimos parar en el área Leon con intención de hacer allí el ultimo cambio de aguas antes de llegar a Madrid. Decidimos no pasar "peaje" y nos vamos por el puerto de Pajares, y la decison es buena, pues aunque tiene muchas curvas, tan solo le metemos al viaje 10 minutos mas. Una vez en Leon, nos dimos cuenta que el área no es nada cómodo para su uso, con el grifo de agua en un sitio, el vacilado de grises en otro y el de negras en el otro lado de la calle y en medio del paso de la gente, difícilmente lo podían haber hecho peor a posta. Así que decidimos no hacer nada y parar al día siguiente en Olmedo.
Amanece el domingo tras una nueva noche en Leon tranquila y después de desayunar partimos para Olmedo, donde pese a la presencia de unos impresentables "acampados" conseguimos vacíar y llenar depósitos, y ponemos rumbo a Madrid. Nuevamente decidimos no hacer uso del peaje y nos vamos por el Alto del Leon, con tan mala suerte que en Guadarrama nos encontramos con la ultima etapa de la Vuelta Ciclista, que esta vez si que nos hizo polvo, ya que nos tuvo parados cerca de 30 minutos, que unidos a lo escapado del puerto, nos metió cerca de una hora mas de viaje.
Vigilando no volver a cruzarnos con la caravana ciclista llegamos a casa justo para comer, finalizando así nuestra ultima semana de vacaciones estivales.
Resumen:
Fechas: del sab. 1.Sep al dom. 9.Sep 2012
Zonas visitadas: Gijón, Museo Minero, Arriondas y río Sella
Noches: 8
Pernoctas: Area Leónx2, pk avenida Portugal (Gijón)x4, pk Poniente y pk Arriondas (c/Inocencio del Valle)
Km(ida y vuelta): 1100 km