Un nuevo fin de semana largo, coincidiendo con el día de Todos los Santos, y una nueva oportunidad para viajar en autocaravana, en un primer momento nuestra intención es ir a conocer Ciudad Rodrigo, pero las malas previsiones meteorológicas nos hacen variar el destino dirección al interior de Murcia pasando por los pueblos más populares de las provincias de Albacete, Cuenca y Murcia.
Salimos a media tarde, siendo nuestro primer destino: Belmonte, extrañamente poco trafico para ser puente, posiblemente por la mala previsión metereológica durante los próximos tres días, así que llegamos pronto, aparcamos en la c/Guadarrama, en el descampado de arena junto a la valla, con miedo por la posibilidad de que se monte un barrizal por la lluvias que está previsto que caigan en las próximas horas. Salimos a dar un buen paseo, y aunque lo buscamos, no conseguimos encontrar la entrada al impresionante castillo que ilumina desde la altura todo el entorno, pero si donde está la oficina de Información y Turismo, para venir al día siguiente. En cuanto al tiempo, nos hemos traido los paraguas ya que chispea ligeramente. Vuelta a la autocaravana, cena y a la cama. Ya está lloviendo con mucha fuerza.
Noche muy tranquila acompañados del sonida de la lluvia que no para de caer en toda la noche. Nos levantamos tarde y sin prisa, desayuno tranquilos y nos vamos a Información y Turismo donde nos enseñan las bondades de Belmonte, llamamos al respomsable de las visitas guiadas a ver si tiene ruta disponible, pero no nos convence ya que ya ha realizado la visita del castillo y solo le queda la colegiata, que no estamos muy interesadoas, así que nos vamos directamente al Castillo, la entrada son 10€, lo que nos parece excesivamente caro, pero para nuestra sorpresa, la entrada incluye una visita visita teatralizada que empieza justo cuando entramos, y es muy divertida y didactica, sobre todo para los pequeños "soldadillos" que van con sus padres, les hacen jurar la defensa de Belmonte y los derechos de Juana frente a Isabel, y les convierten en caballeros. Fuera sigue lloviendo a cantaros. Una vez finalizada la visita, recorremos todos los torreones por nuestra cuenta, luchando con tra las inclemencias del tiempo, el viento nos vuela los paraguas que cumplen excasamente su función y nos calamos enteros. Para subir a la torre del Homenaje, yo subo por la escalera de caracol original, pero María José no se atreve, y bajo a buscarla para realizar la subida por las nuevas escaleras. Ya van a cerrar el castillo así que iniciamos el regreso a la autocaravana, que nuevamente es un infierno, con el ostigo del viento que nos revienta los paraguas y la lluvia nos empapa de completamente: pantalones, plumas e incluso la ropa interior. Por fin llegamos calados a la autocaravana, junto a ella, compramos unos buñuelos en una panadería del pueblo. Nos cambiamos a seco y comemos, tras la comida, decidimos seguir ruta y poner rumbo a Moratalla, ya que toda nuestra ropa está empapada y posiblemente ya no podamos salir a pasear más, además de que el tiempo tampoco acompaña. Llegamos en 3 horas a Moratalla, aparcamos en la calle Cruz del Humilladero, paralela a RM-703. Damos una vuelta por Moratalla, que parece bastante muerto, pero con una temperatura excelente próxima a los 20 grados, y nada de lluvia, lo que nos da la vida después de la mañana de infierno metereológico que habíamos pasado. A la vuelta intentamos buscar un bar para tomarnos una cerveza, pero no hay ninguno, en el centro vemos un par de bares pero con abuelos cenando, así que tampoco nos atraé mucho. Al llegar a la autocaravana, descubrimos que es la zona de copas, menos mal que no hemos aparcado en la autonómica, si no, no habríamos pegado ojo hasta el fin de la marcha nocturna. Cena, con unos chiquillos tocandonos la puerta y saliendo corriendo, que parece que tienen más miedo que nosotros, y es su forma de celebrar la noche de Hallowen, y sin más, nos vamos a la cama.
Nos levamtamos tarde, pero gracias al cambio de hora es temprano, desayuno y nos vamos al castillo, que para subir a la torre del Homenaje requiere ascender por una empinada escalera de caracol, así que decidimos no pagar la entrada, no obstante, el acceso al patio de armas es gratis y se puede subir al paseo de ronda, así que solo nos queda sin ver la torre del Homenaje. Vuelta por el pueblo, intentando no pisar las multiples cagadas de perro que nos vamos encontrando en el camino. No nos acaba de convencer el pueblo, así que directamnete decidimos irnos de aquí para concer Caravaca de la Cruz. Llegamos enseguida, y nos vamos a dar una vuelta a conocerlo. Aparcamos en una explanada inmemsa junto al campo de fútbol, junto a otras 3 o 4 autocaravanas. Subimos a la basílica menor del Santuario de la Santísima y Vera Cruz de Caravaca (la única mayor es la de San Pedro), precioso el pórtico que nos deja impresionados, no habíamos visto nada así en la vida, de ahí vamos a la oficna de Turismo, donde nos recomiendan ver las fuentes del Marqués, paraje natural de aguas cristalinas, comemos primero y tras reponer fuezas vamos andando al paraje, no mas de 2km andando, no conseguimos sacar entrada, así que cuando vemos a los vigilantes nos metemos por otro camino para despistarlos. Muy bonito, con nacimiento de aguas cristalimas, aunque está prohibido el baño en las mismas. Volvemos a la autocaravana e iniciamos el viaje de regreso, con nuestra parada final en Alcalá del Jucar, donde como han cambiado la hora, llegamos ya de noche. Vamos directos al parking del castillo, aparcamiento inclinado junto al cortado, aparcando de frente para estar inclinados hacia adelante y que Maria José no tenga sensación de que se va a caer de la capuchina. Hace mucho viento. Bajamos hasta el pueblo y cenamos en el restaurante Los Robles, 40€, muy buenas las berenjemas y la pluma de cerdo ibérico, pero las croquetas frías y la sepia sin hacer, no tomamos postre. Regresamos a la autocaravana, hace mucho más viento que cuando nos fuimos, y María José pasa miedo incluso subiendo por la cuesta que nos lleva al parking del castillo. Llegamos al parking y hay otros 3 o 4 coches junto al nuestro y nos vamos a la cama.
Noche muy ventosa pero no fría, María José se pasa despierta media noche quejándose del movimiento, está pasando mucho miedo, y a las 05:00 se baja a la cama de Laura, a las 06:00 le digo de irnos a otro parkíng, asi que me pongp las lentillas y nos vamos a uno de los parkings de la calle Puerta del Sol, junto al puente, saco el ticket de 2€/24horas y nos volvemos a meter a la cama y dormimos hasta bien pasada la mañana. Desayuno y nos vamos a oficina de turismo donde compramos la entrada del castillo (2.5€ cada una), subida a ver el castillo, muy buenas vistas, el viento sigue soplando con fuerza, paseo por el patio del castillo, y visita a la típica casa cueva de la zona. Tras el castillo, nos vamos a la cueva de Garamendi y del Diablo (3€ entrada con consumición) entramos por arriba y salimos por abajo donde nos tomamos unos vermuts muy ricos en una terraza mirador, muy tranquilos salvo por los petardos de al lado. Dejamos la otra cueva para una próxima visita. Tras el refigerio volvemos a la autocarava, por la vereda junto al rio, superchulo, en verano debe ser muy fresco. Comida y salimos pronto (tenemos 300km de vuelta), con parada en Castillo de Garcimuñoz donde cambiamos y continuamos a casa, extrañamente sin excesivo tráfico.
Damos por concluida una nueva aventura y dejamos pendiente volver a visitar Belmonte en un fin de semana sin lluvia, para disfrutrar de las maravillosas vistas del castillo y pasear por sus calles, así como volver a Alcalá del Jucar, aquí para hacernos alguna de las rutas que recorren las hoces del Jucar y que tienen una pinta estupenda.
Resumen:
Fechas: del vie. 29 Oct al lun. 1 Nov 2021
Zonas visitadas: Belmonte,
Moratalla,
Caravaca de la Cruz,
Alcalá del Jucar
Noches: 3
Pernoctas: c/Guadarrama (Belmonte), c/Cristo del Humilladero (Moratalla) y pk Castillo/pk Puerta del Sol (Alcala del Jucar)
Km(ida y vuelta): 880 km