Brea de Tajo - Operación capuchina

Un soleado fin de semana y una nueva oporturnidad para viajar en autocaravana con destino Brea de Tajo, donde dejé pendiente visitar su zona de lavado de vehículos para intentar limpiar el techo de la capuchina. Así que dado que María José se encuentra con su hermana de viaje en Uzbekistan, yo monto la escalera de casa en la autocaravana, un cepillo fuerte, el cubo de fregar y el cepillo de la autocaravana, además de una botella de Fairy y otra de Brumol, y pongo rumbo a un fin de semana dedicado a poner bonita a La Conchi.

Salgo de Madrid a las 18:30, algo más tarde de lo que tenía previsto, ya que quería llegar de día, y como han cambiado la hora a horario de invierno, a esta hora ya es de noche. Llego a Brea de Tajo en poco más de una hora. La entrada al área hay que hacerla desde la calle Mayor, subiendo por la calle de Calvo Sotelo, frente al Ayuntamiento, y donde hace esquina el restaurante El Campanario, donde está la indicación hacia la plaza de toros, o bien, cogiendo la plaza de la Travesía, el resto de calles anteriores son muy estrechas con coches aparcados. Estoy completamente solo en el área, que ahora en lugar de 6 plazas, cuento unas 20. Hay un cartel indicando que el área es de pago: 5€, el dinero se abona al personal del ayuntamiento, en el estanco o en los bares Plaza o Tendero. Vuelta al lavadero para verificar el funcionamiento: moneda de 1€ y espacio suficiente para poner la escalera a ambos lados, aunque ya no se puede lavar desde el muro, dado que han puesto una verja al rededor. Vuelta por el pueblo donde descubro la senda de la Tía Trini, y acabo nuevamente en el área de autocaravanas, pero desde abajo. Sigo paseando un poco más, ya hace frío, así que voy con el plumas que no me estorba. A las 21:00, regreso a casa, mi cena preferida con una buena serie y a las 23:00 a la cama. Aunque hace fresco, se puede aguantar perfectamente, así que no enciendo la calefacción.

Noche muy fría, dentro del edredón se está de maravilla, pero es sacar una mano y se queda congelada, me cuesta horrores salir al baño, pero a eso de las 06:00 no tengo más remedio, hay unos 7 grados, pero dentro de la cama estoy estupendamente, así que me quedo acurrucado hasta pasadas las 09:00. Desayuno y a las 10:00 pongo rumbo al lavadero. Saco todo y le doy un primer remojón a la autocaravana. Luego me pongo con el techo, la escalera muy baja, no consigo alcanzar la zona de la capuchina, de todas formas tampoco es que haga nada, ni el Fairy, ni el Brumol, y eso que le restriego fuertemente con el cepillo que he traido de Muduex. Pruebo también con el cepillo grande de la autocaravana, mojado en Fairy, que al menos, con él sujeto al palo de la escoba, si que llego, pero la sucidedad no se arranca. Viene un coche que parece que quiere lavarlo también, pero al rato decide venir en otro momento, yo estoy en medio de la faena, subido en el techo de la autocaravana pasandole el cepillo. Finalmente me doy por vencido y hago un par de repasos con el cepillo del lavadero y enjuague con agua a presión y me marcho, justo para dejar el hueco a un vehiculo que quiere usar el lavadero. Regreso al área para situarme en el mismo sitio que había pasado la noche anterior. Ha venido una camper que se ha situado en las plazas más abajo, junto al parque infantil. Una vez instalado me pongo a probar a limpiar fuertemente con Brumol y el cepillo el chorrete junto a la ventana de la cocina, pero no hay forma de que salga. Sin embargo, con el trapo con el que enjuagaba el Brumol lo empiezo a pasar por toda la autocaravana, que empieza a quedar reluciente (salvo las negreces). Llega un coche y su ocupante se hacerca a saludar, es el autocaravanista que ya nos saludo en nuestra primera visita, y me vuelve a contar la misma historia de que es de un pueblo próximo, que alquila autocaravanas, y que se pasa aquí los fines de semana, le extraña mucho que este fin de semana este el área vacía (mi hipotesis es que es debido al puente el fin de semana anterior), y que tiene alguna autocaravana de la misma antiguedad que Conchi y que pide 20.000€ por ella. También me recomienda usar amoniaco perfumado para las manchas negras, dejando actuar unos 20 minutos. Tras la charla, termino de darle un repaso a toda la autocaravana con la balleta. Como es todavía pronto, decido ir a pagar, por lo que he visto, el único que está abierto es el bar el Tendedero, así que me voy para allá. Hay bastante gente dentro, todos del pueblo, y la señora, que le oigo decir que es de Guadalajar, es la que me cobra la estancia, 5€ por día, y me da un papel como recibo que debo poner en el salpicadero, pero que no pone la fecha, así que tampoco se si tiene mucho éxito esto de pagar. Veo que los que están en la barra junto a mi se están tomando un vermut, así que me pido uno yo también (2.5€), buenísimo. Con un poquitin de pedo me voy a la autocaravana, son ya las 14:00, y creo que me he ganado las migas que me he traido de comida, la autocaravana está ahora supercaldeada. Tras la comida, ya recuperado, un largo paseo nuevamente por la senda de la Tía Trini, recorriendo todo el perímetro de Brea, pero este pueblo se me queda pequeño. A las 18:00 paso por la autocaravana y cierro ventanas y cortinas para mantener el calor, y vuelvo a salir rumbo a Estremera por el paseo junto a la carretera, pasando por las pistas de paddle, pero se acaba el camino, así que media vuelta, para descubrir que un lindo gatito se ha encariñado de mi, y pasea a mi lado, rascandose en cada farola, supongo que para incitarme a hacerselo yo, cosa que lógicamente no hago, cuando llego al cruze, el gato me abandona. Regreso a la autocaravana, son cerca de las 20:00 y ya hace frío, aunque la autocaravana sigue caldeada, algo de electrónicos, cena y a dormir a las 23:00.

Noche nuevamente fría y nuevamente me cuesta levantarme para ir al baño, pero dentro de la cama se está de maravilla, así que como no tengo prisa, me quedo hasta casi las 10:00. Desayuno y a las 11:00 pongo rumbo a Estremera, tengo la ruta de wikilok, son 12 km en una ruta circular de tranquilos campos, no me cruzo con nadie. En una hora ya estoy en Estremera, siguiendo la ruta de wikilok, callejeo un poco por este pueblo y sin más, pongo rumbo de regreso a Brea, algo más de otra hora y a las 13:30 ya estoy en la autocaravana. Me he traido un par de sandwich para comer y una lata de mejillones, y tras reponer fuerzas, hago una rápida limpieza de la autocaravana, hago el cambio de aguas, y pongo rumbo a Madrid a las 16:00, y en una hora ya estoy en casa.

Doy por concluida una nueva aventura, en esta ocasión en solitario, le había ofrecido a Pury el venirse, pero tenía que estudiar para unas oposiciones próximas, por lo que la descarté, además de que he ido sin los asientos de la vivienda, ya que los están retapizando, y eso ha hecho que ete viaje haya sido algo incómodo, al no tener donde sentarme cómodamente, aún así, lo he disfrutado un montón después de dos meses sin salir.

Resumen:
Fechas: del vie. 4 Nov al dom. 6 Nov 2022
Zonas visitadas: Brea de Tajo, Estremera
Noches: 2
Pernoctas: área Brea de Tajo x 2
Km(ida y vuelta): 140 km